• Autor/a: Rubén Lo Vuolo
  • Publicación: 08-5-22

No debe haber una evidencia más palpable del fracaso de las políticas post-Convertibilidad que el renacimiento de las ideas que fueron hegemónicas bajo ese régimen y llevaron al estallido económico y social de 2001-02. Un ejemplo notable es el retorno de la más extrema ortodoxia económica que vuelve a plantear la dolarización de la economía argentina como salida a los múltiples problemas económicos del país.

Para esta gente, la moneda es sólo un instrumento que facilita los intercambios mercantiles y la acumulación de capital, en un sistema social comprendido como una mera agrupación de personas consideradas “libres” para celebrar contratos mercantiles. La moneda sería sólo un medio para facilitar el funcionamiento de los mercados y hacer efectivo los poderes asimétricos que allí se ejercen; les resulta indistinto si es oro, sal o una divisa emitida por un Estado extranjero.

Se equivocan. La historia demuestra que la moneda que emiten los Estados modernos, que es la que interesa, no surge de los intercambios mercantiles y no tiene funciones meramente instrumentales sino de la constitución de los Estados soberanos contemporáneos.

Seguir leyendo artículo completo aquí.

 

 


CIEPP

MONROE 2569, 1° "A" (C1428BLO) BUENOS AIRES, ARGENTINA
TELÉFONO / FAX: (54-11) 4834-9296
EMAIL: CIEPP@CIEPP.ORG.AR

ciepp twitter seguir